Volviendo a Casa

Fuente: Blog Volviendo a Casa

Esta es una página que siento de parte de Dios iniciar para todas aquellas personas que han visto u oído algo de Dios, pero no lo han conocido aun personalmente; también para todos aquellos que lo conocieron, pero en algún momento de su vida se alejaron y aún no han encontrado el camino de regreso.

Dentro de este grupo pueden existir algunos que han nacido en hogares cristianos, han asistido regularmente a su iglesia, han estado en algún grupo religioso (llámese como se llame); pero que reconocen que aún “no les ha funcionado” o “han perdido el horizonte” y no saben hacia donde ir o que hacer.

¿Cómo fue que llegué a esto?

Fue cuando comencé la universidad; yo vengo de una iglesia dónde creemos que la universidad es un peligro para el cristiano, así que la mayoría en esta iglesia no asistimos a la universidad.   Sin embargo, Dios quiso que entrara a la universidad y justo aquí es donde empieza el “por qué”.

Soy una persona un tanto extrovertida; así que es fácil para mí iniciar una conversación.  Durante estos tiempos en la universidad he conocido muchas personas que viven o vivían de una manera, que a los ojos de la iglesia, es reprobada; pero sé que Dios nos ha puesto por luz a este mundo (por cierto que me tomó tiempo entenderlo) así que le pedí que su gracia estuviera conmigo para mostrar a mis compañeros, amigos y catedráticos que hay un camino más excelente en Dios por medio de su hijo Jesucristo.

Durante este tiempo, muchas proposiciones (algo interesantes para muchos) fueron ofrecidas: fiestas, alcohol, entre otras; sin embargo, como una resolución personal, decidí rechazarlas argumentando que soy cristiano y sigo a Cristo; porque amigos y amigas, ser cristiano es mucho más que creer en Cristo, es seguirlo.

Para mi sorpresa, las mismas personas que me ofrecían estas proposiciones, o que me contaban sus experiencias, resultaban ser personas que se llamaban “cristianos”; sus excusas eran algo así como:

• "Soy cristiano, pero es que ando algo débil."

• "Bueno, nací en un hogar cristiano evangélico, supongo que yo también soy evangélico."

• "Bueno, asisto a la iglesia y mis papás son cristianos, pero yo no ando muy metido en eso."

• "Reconozco que soy borracha a morir, pero soy cristiana y sé que no estoy haciendo lo correcto."

Entonces allí me di cuenta que algo no andaba bien; que algunos fundamentos están en ruinas, y tal como dice la biblia “Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento”.

El fin de esta página no es condenar a la gente, sino mostrarles que hay un camino de regreso a casa; hay un Padre que aún te está esperando con los brazos abiertos, y todos los días mira al horizonte para ver si estás “Volviendo a Casa”.

Espero que Dios te bendiga, disfruta las lecturas y los archivos multimedia que estaremos subiendo.

Bienvenido, atentamente:

David E.